miércoles, octubre 31, 2007

Ocho Cucarachas (para Mai)

Ocho cucarachas habitan mi cuaderno. Ocho cucarachas que pasan de una hoja a otra, mirándose entre sí y burlándose de mí.
Son ocho las cucarachas, algunas del tamaño de un botón, otras como gomas de borrar. Unas pocas como patinetas.
Van y vienen, se esconden, esquivan mis puñetazos. Hay una que trota, otra que canta, y el resto parece jugar a la escondidas.
No las odio, no las quiero, no me divierten, no me repulsan, sólo me molestan.
Son ocho las cucarachas, que zigzaguean mis renglones como borrachas, que desafían la punta de mi birome.
Son ocho las cucarachas que chapotean y desdibujan mi tinta, y me da la sensación de que no les gusta lo que escribo.

Ocho cucarachas okuparon mi cuaderno. Ocho cucarachas que se mueven cómodas, como en casa, hamacándose o durmiendo la siesta en el alambre espiralado.
Son ocho las cucarachas los únicos habitantes vivos de mi cuaderno, porque las pocas letras parecen inertes a su lado.
Corren y juegan, felicean, y están lejos de temer. Ahora hay una que es piedra, otra que es papel, y otra que es tijera. El resto recita adivinanzas, y también las inventa.

Eran ocho las cucarachas, hasta que cerré mi cuaderno y me senté sobre él.
Eran ocho las cucarachas, y ahora son esto.

martes, octubre 23, 2007

¿En cuánto zapatos se puede estar?

Sobre la tierra, pies que intentan
pies que madrugan
que explotan y en algún raro caso
que gozan

Sobre el asfalto, pies que se mueven
pies que sufren
que deambulan y en algún raro caso
que disfrutan

Miles de almas, miles de zapatos,
Almas, situaciones, momentos, miserias

Sobre el cemento, pies que corren
pies que caminan
que queman y en algún raro caso
que flotan

Miles de personas, miles de zapatos,
Personas, espíritus, lamentos, condenas

Miles de personas, miles de zapatos
Y yo
solamente
entro en los míos.

lunes, octubre 22, 2007

No te des cuenta

a veces cuando hablo con vos
tengo la sensación
sin hablar con vos
de que no te das cuenta

puede ser y hasta puede ser
lógico
que no hayas hecho las cuentas
pasado en limpio
cerrado la mesa
visto el producto
de nuestro amor

a veces cuando hablo con vos
tengo la seguridad
de que nada es seguro
de que somos vos
y yo
sin escudos

puede ser y hasta puede ser
mejor
que no hayas caído en la cuenta
listado lo bueno
apuntado lo malo
entendido lo mágico
de nuestro amor

y todo eso puede ser y hasta todo eso puede ser
una bendición
inconciente
y mejor
para los dos.